5. ¿QUÉ COMEN LOS HALCONES?

Volátiles. O sea, animales que vuelan. Sobre todo aves aderezadas con algún murciélago en raras ocasiones. Solo cazan animales en vuelo y mientras vuelan. Son el terror de los estorninos y las palomas, presas que sumadas ambas, constituyen el 80% de su alimentación en las ciudades. A esto los ecólogos lo llaman “reconstrucción de la pirámide trófica”, de tal modo que las especies plaga tengan un enemigo que las controle de forma eficaz. El halcón peregrino no solo es bello, no solo le debemos la vuelta a Granada porque nosotros lo expulsamos de la ciudad, sino que también es útil, realizando su labor de forma natural y gratuita.

Nosotros, en el proceso de cuidado y seguimiento de los halcones, el denominado hacking o crianza campestre, les proporcionamos una alimentación natural basada en palomas y alguna codorniz. Raramente beben agua, por lo que tienen que obtener la poca hidratación que necesitan (gracias al optimizado sistema de filtración renal de las aves, muy superior al nuestro) de la comida. Por eso es importante que les proporcionemos comida fresca a diario, palomas recién sacrificadas, para mantener un buen estado de salud.