31. CERNÍCALOS Y HALCONES

El primo del halcón peregrino también es nuestro vecino

Son muchas las veces que nos llegan noticias de avistamientos de halcones en la ciudad, pero lo cierto es que en bastantes ocasiones no se trata realmente de halcones, sino de uno de sus parientes más cercanos: el cernícalo.

Esta bonita y simpática ave también busca y encuentra su hueco dentro de las ciudades. De hecho, lo hace con bastante más frecuencia que el halcón peregrino. No nos vamos a detener demasiado en los aspectos científicos, pero sí vamos a aclarar que existen en los campos y ciudades de España dos especies de cernícalo: el cernícalo vulgar (Falco tinnunculus) y el cernícalo primilla (Falco naumanni). Entre estas dos no existen demasiadas diferencias morfológicas a simple vista, salvo que el primilla es algo menor en tamaño. Sin embargo, sí que existen claras diferencias entre el halcón peregrino y los cernícalos.

Hembra (izquierda) y macho (derecha) de cernícalo vulgar.


Aparte de las diferencias que saltan a la vista, como el contraste de colores entre pecho y dorso o las pronunciadas bigoteras del peregrino, tenemos que hablar también del tamaño y del peso. El cernícalo es más pequeño y además pesa muchísimo menos si lo comparamos proporcionalmente con el tamaño de su primo.

Aunque se parecen bastante en silueta de vuelo, hay cosas que delatan a ambas especies. El cernícalo tiene la cola y las alas más finas y más largas en proporción al halcón. Además tiene en el extremo de la cola una banda negra muy característica.

Silueta en vuelo de cernícalo primilla (izquierda) y halcón peregrino (derecha). 
Imagen de cernícalo por Lip Kee.

En cuanto a costumbres y alimentación, ya sabemos que el halcón peregrino caza solamente las presas que se encuentran en vuelo, a las cuales alcanza haciendo uso de su increíble velocidad y habilidad en el aire. El cernícalo en cambio se alimenta de presas que suelen rondar por el suelo, como pequeños roedores, reptiles, pequeñas aves o grandes insectos. Para encontrar a sus presas, el cernícalo observa el terreno, normalmente zonas llanas con cultivos y estepas, mientras se mantiene suspendido en un punto en el aire batiendo las alas, a esta típica acción se le denomina “cernirse”, y es la que le da a esta rapaz su nombre vulgar. Al encontrar un objetivo, se lanza en picado para atraparlo.

Albayzín, ejemplar de halcón peregrino liberado en 2012. Rápidamente podemos entender
por qué son de la misma familia evolutiva (género Falco).

Quizá muchos de vosotros ya estéis familiarizados con los cernícalos granadinos, pero para los que no, os proponemos un pequeño trabajo. Cuando veáis una silueta que os resulte similar a la de un halcón, deteneos unos segundos y observad cómo vuela, prestad atención y tratad de distinguir de qué especie se trata. Tened en cuenta que son pocas las probabilidades de ver a un halcón peregrino en la ciudad, en primer lugar porque hay pocos, y segundo porque... ¡Vuelan muy rápido!

Hembra de cernícalo común (izquierda) observando cómo uno de los halcones
del hacking de 2011 sacia su hambre.