28. LA NOVIA DE ZAIDÍN

Cuando descubrimos la atalaya de Zaidín nos encontramos con una agradable sorpresa: estaba acompañado. Porque no solo comparte comunidad de vecinos con una pareja de cernícalos, sino también con una preciosa hembra mudada de halcón peregrino. Para que todos la conozcáis, acompañamos esta entrada con varias fotos. La hembra no presenta anillas ni cualquier otra marca de origen humano, por lo que es un animal de origen salvaje. Todavía duermen en camas separadas, y desde hace unos días no la vemos por el edificio, pero esperamos que sea un “cese temporal de la convivencia” y regrese de nuevo. Tampoco podemos descartar que tengan “citas a escondidas”, porque rastrear a estos bólidos emplumados en la ciudad no es nada fácil.

Una de las tardes que estábamos de seguimiento, ella llegó con una paloma en las garras y se posó en su lugar habitual para dar cuenta de su presa. Cuando acabó se limpió el pico como siempre hacen las aves. Entonces regresó Zaidín, pasando como un relámpago alado a 10 metros de distancia. Justo en ese momento ella empezó a emitir sonidos de interacción con el macho, tal y como podéis ver en el pequeño vídeo que adjuntamos. Fue un momento intenso para nosotros, porque es la primera vez que presenciamos algo así entre un halcón cuya libertad es fruto del trabajo del proyecto y un halcón de origen salvaje.





Zaidín nació el 7 de abril de 2012. Durante la primavera-verano de 2013 realizó su primera muda del plumaje, que ya es, y será siempre, de adulto. En terminología cetrera es un “halcón mudado”, y en ornitología se dice que es un halcón de tercer año de calendario (3ac). A pesar de que hasta abril no habrá cumplido los 2 años de edad ya es maduro sexualmente y podría reproducirse esta primavera. El celo del halcón peregrino empieza, en nuestra latitud, con el mes de febrero, y las puestas suelen ocurrir a lo largo del mes de marzo. Nada nos haría más ilusión que ser testigos de la paternidad, y maternidad, de esta pareja. Si ocurre, el mundo lo sabrá. Estad atentos.